EFE
El Universal
LONDRES, INGLATERRA
LUNES 19 DE OCTUBRE DE 2009 | 09:06
La Federación de Futbol Inglesa confirmó que el encuentro disputado entre el Liverpool y el Sunderland, el pasado sábado en la Premier, no se volverá a jugar pese al controvertido gol que dio la victoria al once local en el Estadio de La Luz.
El jugador de los "Black Cats", Darren Bent, firmó el único tanto del encuentro con un balón que rozó una pelota de playa roja que algún hincha arrojó al área del portero del Liverpool, Pepe Reina, distrayendo su atención.
El hecho de que ese objeto estuviera en el terreno de juego podría haber servido para que el gol fuera anulado, algo que sin embargo no ocurrió.
Un aficionado, un niño, lanzó la pelota de playa al terreno de juego, por lo que cuando Bent lanzó su disparo, Reina no logró decidir cuál esférico debía atajar y terminó en el único gol del partido.
De no haber estado la pelota roja, Reina hubiese detenido con relativa facilidad el envío.
Por su parte, el técnico de los "reds", el español Rafa Benítez, decidió tomarse el incidente con filosofía: "Estas cosas ocurren".
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