EL UNIVERSAL
MARTES 16 DE DICIEMBRE DE 2008
Las luces de las series navideñas ya se han encendido en los hogares, es el tiempo de las piñatas, posadas y las cenas familiares, sin embargo, también es temporada de regalos y gastos económicos.
Especialistas consideran que 8 de cada 10 personas gastan completamente el aguinaldo que reciben en este periodo.
El doctor Enrique Camarena Robles, especialista en psiquiatría, comenta que diciembre está colmado de euforia y júbilo que expone a las personas al consumo, no obstante, es importante moderar las compras en este mes, ya que, aparentemente el aguinaldo proporciona un poder adquisitivo mayor.
En esta época algunos suelen malgastar porque reciben más dinero de lo habitual, por medio del aguinaldo, bonos o fondos; no obstante, este capital "extra" es en realidad fruto de todo un año de trabajo y por eso se debe hacer un esfuerzo para guardar por lo menos el 50 por ciento y conservarlo como ahorro.
"En otro extremo, hay individuos en los que produce un estado de melancolía o incluso depresión. La Navidad y el Año Nuevo significan el término de un ciclo y al no concluir las expectativas favorablemente suelen sentirse decepcionados; en los dos casos, son vulnerables a la publicidad", acota el especialista.
Indicó que socialmente se han establecido patrones de conducta para que la Navidad sea vista como "tiempo de dar y recibir", y esto ha sido comercializado para que en el afán de agradar a los seres queridos se brinden obsequios, en ocasiones, costosos.
Camarena Robles explica que esta temporada decembrina produce regocijo, algarabía y sensación de plenitud, ya que es un momento de afecto y acercamiento con familiares y amigos.
Además es instante propicio para la reflexión, cuando la gente ha alcanzado logros y metas en el año que esta terminando, manifiesta alegría.
Por su parte, el doctor José Pérez Bailón, psicólogo clínico, subraya que la Navidad más que un momento o una estación, es un estado mental en el que se refuerzan valores como la paz o generosidad.
Por ello sugiere algunos consejos para ajustar las cuentas navideñas y no comprar más de lo necesario: Es importante fijar un presupuesto antes de iniciar las adquisiciones, priorizando lo más elemental; incluir la cena, los regalos, la decoración, ropa invernal o algún imprevisto.
Se debe realizar una lista de los objetos, esto ayudará a adquirir lo que realmente hace falta y evitará la dispersión ante cosas innecesarias o con las que ya se cuenta. Ésta debe tener un orden jerárquico, dependiendo el grado de importancia de lo que se requiera.
Crear hojas de registro en las que se anoten los gastos que se hacen; a fin de llevar un control.
Finalmente, los especialistas recomiendan vivir los días de Navidad con tranquilidad, relajación, y entusiasmo. Tener presente que, lejos de ser un compromiso, estas fechas deben suponer un tiempo de gozo y alegría para compartir con familiares, amigos y compañeros. Y prever con tiempo las compras para evitar que sean impulsivas o en el último momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario